¿Fue humana la expedición espacial con el perro Laika a bordo?

Bien, estás haciendo una serie de preguntas con esta publicación.

Primero: ¿fue humano el sacrificio de Laika? No claro que no. El tratamiento humano de personas o animales debe incluir la falta de sufrimiento causado por factores externos. Los científicos e investigadores que intentaban determinar por lo que pasaría una persona en este escenario actuaron de manera inhumana, sin otra opción, ya que no podían encontrar la manera de devolver a la pobre criatura a la tierra viva y sin daños.

Segundo: ¿enviar a un perro al espacio fue la decisión correcta? Fue desde el punto de vista de científicos e investigadores que consideran el uso de animales un derecho más que un privilegio. Lo que sea. En sus mentes, usar un perro, aunque tenía que ser sacrificado, era “correcto”. Aquellos de nosotros con una ética diferente nos resistiríamos, o trataríamos de descubrir cómo dormir al perro antes de una muerte dolorosa.

Tercero, ¿fue algo bueno hacer? Desde el punto de vista de la ciencia, bendito sea, era lo que era mejor hacer, en ese punto. Los perros están tan ansiosos de complacer, tan serviles, que se dejan enganchar a todo tipo de cables y cosas porque un humano se lo pide. Es la misma razón por la que los beagles se usan casi exclusivamente en pruebas de alimentos para perros y otros tipos de cosas relacionadas con la industria del perro: están dispuestos y perdonan a quienes los lastimaron.

Ya se terminó. El sufrimiento de Laika ha terminado. Supongo que lo que más me sorprende es que, si los científicos soviéticos hubieran pedido humanos voluntarios para hacer ese viaje de ida, habrían obtenido más de unos pocos.

No absolutamente no.

¿Por qué?

Porque los rusos lo trataron como “es un perro. A quien le importa..!!!”

No había un sistema de recuperación en su lugar.

No había un sistema de control de temperatura adecuado a bordo. Laica murió de sobrecalentamiento.

Imagínese en una posición similar.

Solo porque el pobre perro no tenía forma de estar en desacuerdo con las acciones que se le imponían.

Me duele cada vez que escucho el nombre de Laica.

Que su alma se rasgue. Lamento la crueldad que te ha conferido la humanidad. Lo siento mucho.