¡La mejor respuesta a esta pregunta es algunas preguntas más!
Primero, ¿cuáles son tus razones para conseguir otro perro? Ejemplos: ¿Para compañía, para acompañar a mi otro perro, para hacer una actividad o deporte en particular (senderismo, atracadero, pastoreo, etc.)? Comience con sus preferencias primero: ¡este es su perro!
Segundo, ¿cómo está tu pastor alemán con otros perros? ¿Se lleva bien con todos o hay algunos perros que suelen causar problemas? Si tiene un pastor alemán macho o hembra intacto, ¡ya puede saber que un adulto intacto del mismo sexo no es una buena idea! O, si su GSD está castrado y ama a todos los demás perros, entonces piense en los estilos de juego. ¿Hay algunos perros que intentan evitar a tu perro? ¿Cómo son sus personalidades? ¿Hay perros que siempre parecen tener problemas con tu perro? ¿Cómo son sus personalidades?
Evite tener un segundo perro que caiga en una categoría que su perro actual podría no tolerar. Por ejemplo, si a tu perro le gusta perseguir perros más pequeños, una raza de juguete no sería ideal. Lo mismo si a tu perro no le gustan los cachorros: un cachorro no es la mejor opción.
- Hipotéticamente, si los humanos fueron criados durante más de 1000 años, ¿podría haber tanta diversidad como las razas de perros tienen hoy?
- ¿Cuáles son las razas de perros que parecen lobos terribles?
- ¿Qué son los Pocket Pugs y en qué se diferencian de los Pugs normales?
- Si diferentes razas de perros tienen comportamientos diferentes, ¿eso significa que hay genes que controlan claramente el comportamiento?
- ¿La gente está molesta porque la representante del estado de Georgia, Keisha Waited, presentó el HB 313 que propone prohibir 10 razas específicas de perros?
En mi experiencia, los pastores alemanes que se llevan bien con otros perros son mejores con perros más jóvenes del sexo opuesto, y a quienes les gusta jugar el mismo tipo de juegos. Los juegos mutuos de persecución y tirón a menudo son divertidos para los GSD. Los juegos de golpear el cuerpo y morderse el cuello a veces pueden terminar en una pelea.
Si a tu pastor alemán le gusta tirar, asegúrate de que él o ella “compartirá” el juguete con otro perro, y viceversa, antes de fomentar ese juego. Cada perro puede aprender a perseguir y buscar su propio disco o bola grande, si los juegos de tirones no son una opción.
Por último, pero no menos importante, reúna a su Pastor Alemán para una sesión de juego con posibles compañeros de casa. Ninguno de los perros debe esconderse o tratar de alejarse del otro. Si hay fricción o los perros no se acomodan al juego, obtenga una segunda opinión sobre su comportamiento de un entrenador o consultor de comportamiento animal. Si su nuevo perro es un cachorro, hable con el criador del cachorro sobre la mejor manera de presentar al cachorro y a su perro actual.