Hay edades en las que los gatos se adaptarán para compartir su espacio con otro gato, hasta los dos o tres años de edad. Después de eso, se hace más difícil introducir un nuevo animal en la mezcla. Los gatos son territoriales. Las gatas que viven en la naturaleza (en granjas o en la ciudad) formarán grupos sociales para la protección mutua de sus gatitos, pero siempre se aseguran de tener una cierta cantidad de espacio personal. Si puede satisfacer esta necesidad, es más fácil presentar un nuevo gato.
Ambos animales deben ser castrados o esterilizados. Recuerda que los gatos piensan en tres dimensiones. Si proporciona pilas o estantes para trepar donde un gato puede subir mientras otro está en el piso, eso aumentará su nivel de comodidad entre ellos. Es posible que deba tener una caja de arena para cada animal, para evitar orinar en el piso territorial. Y tener espacios seguros donde los animales puedan retirarse unos de otros, especialmente espacios con paredes, como una línea de caja de cartón con alfombra, los ayudará a sentirse mejor al compartir su espacio. Si eres paciente, eventualmente se convertirán en amigos.