No lo harás Siempre. Parte de nuestra sociedad nos ha hecho un mal servicio extremo al decirnos que DEBEMOS “superarlo”, que “el tiempo curará todas las heridas”. No, no lo hará; lo mejor que harás es tratar de aprender a vivir con la herida en tu alma que nunca jamás sanará.
La decisión de terminar con la vida de un amigo es desgarradora … La mayoría de las personas en esta posición descubren que no hay una decisión real en absoluto. Tienen que hacer todo lo posible para poner fin al sufrimiento de sus amigos.
Sin embargo, hay algo que puede hacer para acelerar el proceso de afrontamiento; simplemente, concéntrate en la alegría y la felicidad que te trajo tu perro. Pasa tiempo recordando caminatas en los parques y persiguiendo hojas y ladrando como un lunático cada vez que llegas a casa y cada beso húmedo y descuidado que hayas recibido.
Intenta no concentrarte en tu pérdida; concéntrese en los refrigerios de medianoche y la pizza a escondidas debajo de la mesa y en los momentos en que Fido intentó hacer que se sintiera mejor cuando estaba enfermo de gripe. Piense en las ocasiones en que él o ella le trajeron su juguete favorito con la esperanza de que lo disfrute tanto como ellos.
- ¿Por qué un perro mayor hace pipí en la casa?
- Cómo obtener un certificado de perro de servicio
- Mi perro sobrevivió a un ataque de otro perro y está actuando extraño. ¿Cuándo terminará su trauma?
- ¿Qué golosinas para perros puedes hacer para tu perro?
- Cómo hacer de tu perro un animal de servicio
¡Más tarde (mucho más tarde), piense en tratar de pagar ese amor adoptando un perro mayor! uno que ha sido abandonado por su dueño sin saber por qué. Aunque no puedes esquivar el dolor, la alegría que pueden traerte (y a ti) supera con creces la agonía de perderlos.
Mientras tanto, llorar.
Perdiste un amigo amoroso de confianza; Ningún humano real puede escapar ileso. Lo verás por el rabillo del ojo durante los próximos meses; Es casi como si vinieran a vigilarnos, para asegurarse de que vamos a estar bien.
Por último, no tengas miedo de llamarlos, de hablarles. Si escuchas lo suficiente, te responderán. Lo prometo.